Ciencia e innovación

Estudiantes chilenos logran el primer lugar de su categoría en la RoboCup 2021

Diseñar y programar el sistema de control de un robot Toyota HSR fue el desafío que tuvo que desarrollar UChile Peppers, equipo a cargo del profesor Javier Ruiz del Solar, director del AMTC de la U. de Chile, y que representó a la Casa de Bello en la RoboCup 2021. Pero no solo eso, el desafío consistía en cumplir con una serie de pruebas: recoger objetos que están desordenados en una habitación para dejarlos en su lugar correcto, echar a la basura los objetos desconocidos y entregar a una persona virtual un objeto específico.

Debido a la pandemia de covid-19 la RoboCup de este año no se realizó de forma presencial, de allí su designación de “RoboCup Worldwide”. Por ello, los participantes debieron enviar vía Internet el código con el sistema de control para el autómata, que fue luego ejecutado en un “robot virtual”, es decir, una simulación.

“Usamos Docker. Teníamos una máquina virtual que simulaba al robot. En esta máquina nosotros debimos instalar un paquete que contenía el código de nuestro sistema de control, que luego era ejecutado por los organizadores para controlar al robot. Tras esa ejecución se calculaban los puntos por la prueba y nos entregaban los resultados”, explica Rodrigo Salas, integrante del equipo.

El resultado demandó un gran esfuerzo para los estudiantes, cuenta Rodrigo Salas. “En la semana final pasábamos de largo trabajando toda la noche porque escribíamos código hasta las cinco de la mañana, cuando se cerraba la ventana para enviarlo por la diferencia de zona horaria. Tres horas después nos reuníamos con los jueces, una reunión de Zoom de 50 personas en donde todos los equipos estaban presentes. Entonces la adrenalina no nos dejaba dormir”, detalla.

“Aprendimos demasiado con esta competencia. Al empezar, cada uno sabía su propio tema: yo diseñaba las máquinas de estado para controlar al robot, otro compañero programaba la localización y navegación, otro se encargaba del sistema de visión y otros dos trabajaban en el control del brazo y la manipulación de objetos. En la última semana terminamos mezclándonos y al final todos trabajábamos en todas las áreas”, sostiene.

Este triunfo corona el camino que ya ha recorrido por años el equipo UChile Peppers en la RoboCup. En 2019, último año en que se había realizado el torneo (en 2020 no se efectuó por la pandemia de covid-19), el equipo obtuvo el segundo lugar en la misma categoría y en 2018 lograron el tercer lugar.

El equipo de la U. de Chile estuvo integrado por los estudiantes Rodrigo Salas, Eduardo Loayza, Juan Pablo Cáceres, Felipe Valenzuela, Fernando Feliú y Nicolás Marticorena, y fue apoyado por los investigadores del AMTC Isao Parra, Daniel Cárdenas y Patricio Loncomilla.

Proyecto universitario busca restaurar el bosque nativo de lenga en Aysén

La lenga es uno de los bosques nativos chilenos más extensos a nivel nacional y se encuentra desde la Región del Maule, en la zona alta de la Cordillera de los Andes, hasta el Cabo de Hornos. En la Región de Aysén, particularmente a partir de la década de 1940 con la llegada de colonizadores, se quemaron cerca de tres millones de hectáreas de bosques de esta especie, con el fin de habilitar campo para el desarrollo de actividades agrícolas, especialmente ganadería.

A mediados del siglo pasado, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) comenzó a realizar esfuerzos para reforestar con plantaciones de especies exóticas, principalmente para estabilizar los suelos que se encontraban con signos de degradación.

“Actualmente, la Región de Aysén cuenta con más de 32 mil hectáreas (ha) de plantaciones forestales con especies exóticas y más de mil ha de bosques mixtos, siendo las principales especies utilizadas las coníferas Pinus contorta, P. ponderosa, P. sylvestris y Pseudotsuga menziesii. La Reserva Nacional Coyhaique es una zona montañosa que genera agua, por lo tanto, necesitaba de árboles”, sostuvo el profesor Álvaro Promis, académico de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza (CFCN) de la U. de Chile.

A principios de este siglo, Conaf comenzó un proyecto, explica el profesor Promis, ya que las plantaciones de coníferas estaban grandes y maduras para ser taladas. “Las cortaron y esa materia prima sirvió para iniciativas de apoyo social a sectores de la población más vulnerable, como la construcción de muebles, leñeras, camas”, afirmó.

De acuerdo a la literatura, las plantaciones forestales exóticas, como las coníferas en monocultivos, modifican y reducen funciones ecosistémicas, tales como el microclima, la estructura y la diversidad de especies; por lo que había que diversificar la reforestación. En este sentido, se realizó un proceso participativo con las comunidades aledañas a la Reserva Nacional Coyhaique, las que querían recuperar su patrimonio natural con plantaciones de bosque nativo de lenga.

“La restauración, a través de la conversión de plantación a bosque nativo, se han realizado a través de aberturas parciales al dosel arbóreo; principalmente a través de fajas, cortas de protección y tala rasa. Posteriormente, para restituir las condiciones vegetales originales, se han realizado plantaciones con especies arbóreas de estos bosques, tales como Nothofagus pumilio, N. domebyi y N. antarctica”, explicó el profesor Promis, señalando que estas actividades no han sido evaluadas con precisión.

Por otro lado, advierte el académico, no se han probado actividades como la siembra directa ni la incorporación de especies arbustivas, lo que podría disminuir los costos y favorecer el proceso de restauración.

El proyecto del Fondo Investigativo de Bosque Nativo (FIBN) 032/2019 de Conaf, “Evaluación de prácticas de conversión que favorezcan la restauración de bosques del tipo forestal Lenga en plantaciones de coníferas exóticas”, liderado por el profesor Promis, centra su investigación en encontrar la mejor fórmula para permitir el desarrollo de esta especie de bosque nativo.

“La plantación de lenga es una actividad de alto costo económico, frente a ello, una posibilidad es sembrar semillas. En ese contexto, este proyecto plantea descubrir en cuáles condiciones ambientales se desarrolla mejor la planta de lenga, se adapta, sobrevive y tiene un crecimiento adecuado a partir de la germinación”, puntualizó el profesor Promis, destacando que se trata de una iniciativa innovadora por el objetivo y, a su vez, muy emblemática, por el significado de recuperar el bosque nativo para las comunidades de la zona.

Dependiendo de las especies, una plantación puede costar desde el medio millón hasta los diez millones de pesos aproximadamente por hectárea. Siendo más económica, la estrategia de que el bosque se desarrolle a partir de la germinación, se debe encontrar la conjugación ideal de condiciones ambientales de cantidad de luz, temperatura y humedad, entre otras; así como también factores de seguridad para proteger la semilla.

“Las semillas se las comen principalmente los ratones, liebres, zorros, pájaros, roedores en general. En la Reserva Nacional Coyhaique hay mucha presencia del ratón cola larga. Una de las hipótesis del proyecto es que la hojarasca, capa de hoja caída que se forma sobre el suelo, del mismo bosque de lenga, podría servir de escudo natural para las semillas y así permitir su germinación y crecimiento, pero la de Pino podría afectar negativamente”, aclaró el profesor Promis, advirtiendo que aún hay más factores que inciden en el éxito del crecimiento de una planta, por lo que se trata de un proceso complejo poder romper el periodo de latencia de la semilla y que la planta alcance un crecimiento que le permita convertirse en un árbol.

Para la realización del proyecto se trabaja en ensayos experimentales en la misma Reserva y en laboratorio, con un equipo en el que también participan el profesor Daniel Soto, académico de la Universidad de Aysén, la ingeniera forestal Andrea Ríos y estudiantes de la CFCN que están realizando su tesis sobre el tema. Además de semillas de lenga, se está evaluando la germinación y crecimiento de otras especies nativas de la zona como calafate, maitén, notro, coñires y coigüe.

Como parte del proyecto y con el fin de involucrar a la comunidad en la recuperación de su patrimonio natural, escuelas, organizaciones sociales y vecinales, guardaparques y quienes tengan interés, podrán participar de los talleres de educación ambiental que se ofrecerán sobre ecosistema, colecta de semilla, identificación de las plantas del sector, entre otros aspectos claves que promuevan la conservación de las especies de bosque nativo y la biodiversidad que alberga

Astrónomas de la U. de Chile realizan hallazgo clave sobre la formación de planetas gigantes

El proceso de formación de sistemas planetarios como nuestro Sistema Solar es un terreno en el que aún existen múltiples interrogantes. Uno de estos enigmas fue abordado por la astrónoma egresada de la Universidad de Chile, Teresa Paneque, investigadora que en su tesis de magíster estudió a Elias 2-27, un sistema súper masivo -a 378 millones de años luz de la Tierra- compuesto por una joven estrella, cuyo tamaño es cercano a la mitad de nuestro Sol, y un disco de polvo y gas en torno a ella que dará origen a planetas. Una de las particularidades de este sistema localizado en la Constelación de Ofiuco que motivó su análisis fue la estructura espiral que siguen sus partículas de polvo, característica que ahora se entiende como consecuencia de inestabilidades gravitacionales.

Este fue el foco del trabajo realizado por Teresa Paneque junto a la astrónoma y profesora de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la U. de Chile, Laura Pérez, un proceso que contó además con la colaboración de investigadores de ALMA, del Observatorio Europeo Austral (ESO), del Instituto Max Planck de Astronomía y de las universidades de Milán, Georgia, Leicester, Harvard y Cambridge. La investigación de la joven astrónoma, que actualmente tiene 23 años y cursa su doctorado en el Observatorio Europeo Austral y la Universidad de Leiden, comenzó en el 2018 con el análisis de observaciones recogidas por un proyecto ALMA liderado por la profesora Pérez, quien fue la primera persona en detectar la estructura espiral del sistema en el año 2016.

El trabajo de Teresa Paneque permitió la publicación de dos artículos en la prestigiosa revista The Astrophysical Journal. El que lidera ella junto a la profesora Pérez, “Spiral Arms and a Massive Dust Disk with non-Keplerian Kinematics: Possible Evidence for Gravitational Instability in the Disk of Elias 2-27”, presenta los resultados del estudio sobre la estructura espiral del disco protoplanetario de Elias 2-27. El segundo artículo, liderado por la egresada de la Universidad de Milán y actual investigadora de la École Normale Supérieure de Lyon, Benedetta Veronesi, titulado “A dynamical measurement of the disk mass in Elias 2-27”, corresponde a un estudio a partir del cual se midió la densidad y la masa del disco, trabajo que confirmó otra de las predicciones para los sistemas inestables gravitacionalmente.

La pregunta central del estudio consistió en averiguar la razón de la existencia de espirales en el disco protoplanetario de Elías 2-27. En su análisis, Teresa Paneque y los colaboradores de este trabajo plantean que el comportamiento de las partículas que integran este sistema no solo es determinado por la influencia de su estrella central, sino también por la masa acumulada de su disco de polvo y gas. Esta masividad generaría inestabilidades gravitacionales cuya consecuencia son las estructuras con forma de espiral.

Estas inestabilidades gravitacionales “habían sido ampliamente estudiadas desde la teoría y las simulaciones, pero es la primera vez que tenemos evidencia observacional robusta de que están ocurriendo en un sistema. Es como pillar al sistema con ‘las manos en la masa’” explica la astrónoma de la Universidad de Chile, quien señala que -de acuerdo a simulaciones y modelos teóricos- las inestabilidades gravitacionales serían procesos relevantes cuando la masa del disco de un sistema es más del 10 por ciento de la masa de su estrella. En este caso, el análisis consignado en ambos artículos plantea que Elias 2-27 tendría una masa en torno al 20 por ciento. “En general, según lo que observamos en otros sistemas, estos discos son menos de un 1 por ciento del material de la estrella”, agrega Teresa Paneque.

La investigadora plantea además que a medida que un disco se va haciendo más masivo la cantidad de espirales se reduce y se pueden observar de manera más definida, tal como ocurre en Elias 2-27. Por otra parte, describe que este sistema tendría un tamaño que excede varias veces a nuestro Sistema Solar. “Las espirales de Elias 2-27 se extienden sobre las 200 Unidades Astronómicas, cerca de ocho veces más lejos de lo que está Neptuno de nuestro Sol”, detalla.

Respecto a la importancia de esta investigación, la profesora Laura Pérez enfatiza que esta investigación, realizada con datos del radiotelescopio ALMA, “nos mostró que este objeto es único: pudimos observar por primera vez varias de las predicciones respecto de inestabilidades gravitacionales, desde el atrapamiento de granos de polvo en sus brazos espirales a la cinemática perturbada del disco que cambia cerca de las regiones espirales”.

Teresa Paneque afirma que este hallazgo aporta información clave para entender mejor los procesos de formación de planetas en estos espirales, un entorno que además sería propicio para el surgimiento de planetas gigantes como Júpiter. “Para formar planetas pensamos que hay dos mecanismos principales. Uno es la acreción de pequeñas partículas que se van juntando y originan planetas rocosos como el nuestro, y luego están las inestabilidades gravitacionales, que las simulaciones predicen que son muy eficientes para formar planetas gigantes. Como este disco está bajo ese proceso, lo que uno esperaría es que estas espirales se fragmenten y formen planetas gigantes. De todas maneras, esto no excluye la posibilidad de que también se formen planetas pequeños”, especifica.

La profesora Laura Pérez, en tanto, destaca que “estudiar un disco así nos permite avanzar en la comprensión de esta forma distinta de formar planetas, y de la cual existen pocas observaciones, pues al parecer es bastante inusual”. En este sentido, agrega que conocer la estructura, dinámica y química de estos discos protoplanetarios permitirá comprender cada vez más sobre el proceso de formación de los planetas. “Hay una ‘avenida’ para formar planetas que ha sido predicha, pero de la cual tenemos muy poca evidencia observacional: La formación planetaria a través de inestabilidades gravitacionales en un disco masivo, donde gracias a la gran gravedad del mismo disco este se fragmenta en regiones que colapsan y pueden formar planetas gigantes”.

La joven astrónoma de la Universidad de Chile plantea además que esperan que surja un sistema planetario desde este disco de polvo y gas en un máximo de 10 millones de años. “Eso es poco en la escala temporal de las estrellas, nuestro sol va a vivir por 12 mil millones de años, entonces, 10 millones de años en verdad es muy poco, pero es mucho para nosotros como humanos. Para comprender mejor lo que puede suceder hoy solo podemos combinar la mayor cantidad de observaciones posibles entre distintos instrumentos muy buenos, como los que usamos, en este caso ALMA”.

Pese a este importante avance científico, que establece un puente entre la teoría sobre las inestabilidades gravitacionales y la observación empírica del fenómeno, aún existen muchas interrogantes sobre esta materia. Actualmente, la astrónoma de la U. de Chile realiza su Doctorado en la ESO y su primer proyecto de investigación abordará la composición molecular de este disco. “Queremos entender cuáles son los ‘ingredientes’ primordiales para formar planetas, conocer su reservorio químico y ver sus diferencias y semejanzas con otros discos protoplanetarios. Esto permitiría también aportar en el conocimiento sobre el desarrollo de la vida en los planetas”, comenta.

Desarrolladores de software y administradores de sistemas son las profesiones digitales más demandadas en Chile

Para tomar buenas decisiones laborales es importante contar con buena información. Es por esto que el Ministerio del Trabajo y Previsión Social, junto a sus socios estratégicos en el proyecto Fundación Telefónica Movistar y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), puso a disposición de todos los chilenos el portal DestinoEmpleo.cl.  En el sitio, las personas pueden encontrar cuales son las ocupaciones más demandas -tanto las denominadas tradicionales como las digitales- en base a las ofertas publicadas en diferentes bolsas de empleo como la Bolsa Nacional de Empleo (BNE.cl), Chiletrabajos.cl y Laborum.cl.

Además, en el portal, las personas podrán ver una radiografía al mercado laboral chileno. Por ejemplo, cuales son los sectores productivos que más trabajadores tienen, el porcentaje de la participación femenina en cada una de ellas, el tipo de contrato que tienen e incluso ver la situación particular en cada una de las 16 regiones del país, entre otras estadísticas, según los datos del Seguro de Cesantía y la última encuesta Casen.

Para el subsecretario del Trabajo, Fernando Arab, “DestinoEmpleo entrega orientación actualizada y en línea acerca de las actividades laborales más demandadas en el país, separadas por región, sector productivo u ocupación, constituyendo un tremendo aporte en la búsqueda de mejores oportunidades para los trabajadores”.

Si observamos las profesiones digitales más buscadas, en las diferentes Bolsas de Empleo a abril del 2021, los Desarrolladores de Software son los más necesitados por las empresas. En segundo lugar, están los Administradores de Sistemas, seguidos por los Digital Project Manager, los Especialistas en Marketing Digital, los Consultores TIC y los Desarrollares Web y Multimedia, entre otros (Ver gráfico 1). Si bien la gran mayoría de estas ofertas se concentran en la Región Metropolitana (85,5%) hay vacantes en todas las regiones del país.

Según la información de la última Casen, los “creadores y analistas de sistemas informáticos” -que agrupa a varias de estas ocupaciones- registran una mediana salarial de $1,1 millón, comprendiendo una participación femenina de sólo un 22,1%.

El portal DestinoEmpleo.cl también entrega información respecto a las habilidades digitales más buscadas por los empleadores. Aquí lo más necesitado son los conocimientos en Java, JavaScript, Cloud Computing, HTML, entre otros (Ver gráfico 2). 

“Las actividades digitales sin duda constituyen no solo los empleos del futuro, sino que también y más importante, los empleos del presente, y así queda claro de revisar cuáles son las ocupaciones más demandadas hoy a nivel nacional en las diferentes bolsas de empleo”, finalizó señalando el subsecretario Arab.

Chile comienza una nueva era espacial con la puesta en marcha de 10 satélites nacionales

“Hoy es un día muy importante porque Chile comienza una nueva era espacial. Estamos anunciando la implementación de un Sistema Nacional Satelital de 10 satélites, 8 de ellos fabricados en Chile, que será un notable aporte al desarrollo científico y tecnológico nacional, la Defensa y la sociedad civil. Este sistema, además, tendrá acceso a constelaciones internacionales de cerca de 250 satélites”, afirmó el ministro de Defensa Nacional, Baldo Prokurica, al poner oficialmente en marcha un proyecto satelital que anunció el Presidente Sebastián Piñera en 2019.

Desde ese momento se inició un trabajo interministerial e interinstitucional y un proceso de licitación internacional, a cargo de los ministerios de Defensa y Ciencias y Tecnologías, junto a profesionales de la Fuerza Aérea de Chile, en que participaron 45 empresas de todo el mundo, y que culminó con la adjudicación al consorcio israelí ImageSat International (ISI), con un contrato de cinco años.

El nuevo Sistema Nacional Satelital permitirá a Chile disponer no solo de un satélite como ha sido hasta la fecha, sino de una verdadera “constelación” de 10 nuevos satélites que reemplazarán al “FASatCharlie” que ya hace más de cuatro años cumplió su vida útil. A 2025 se contempla poner en órbita tres minisatélites de menos de 100 kilos cada uno y otros siete microsatélites.

La empresa “Space X” será la encargada de poner en órbita los 10 satélites. El proyecto considera poner en el espacio entre 2021 y 2024 los satélites Fasat Delta, Fasat Echo 1 y Fasat Echo 2. Los otros 7 satélites más pequeños, de entre 12 y 13 kilos, se lanzarán de la siguiente forma: uno en 2023, tres en 2024 y tres en 2025.

Otro tema muy relevante para el país es que ocho de los 10 satélites serán construidos íntegramente en Chile, por técnicos e ingenieros nacionales pertenecientes a la Fuerza Aérea y también a varias universidades del país, anunció el ministro Prokurica.

Para operar estos satélites se inaugurará en 2022 en Cerrillos el nuevo Centro Espacial Nacional (CEN). Allí habrá un laboratorio especializado en la fabricación de satélites y cargas útiles; un centro de emprendimiento e innovación espacial; el centro de control de misión espacial y otro centro destinado al análisis y procesamiento de la información geoespacial, informó Prokurica.

Además, en Antofagasta, Santiago y Punta Arenas se levantarán estaciones de monitoreo de la información que transmitan estos satélites, lo que nos permitirá contar con una mayor gama de imágenes recibidas con mayor frecuencia y a un menor costo.

Junto con el SNSat, se está avanzando en el desarrollo de la estructura administrativa para el Sistema Espacial Nacional, que incorporará una nueva institucionalidad que permita una coordinación e integración efectiva entre distintos servicios públicos, y la participación permanente del mundo académico y el emprendimiento nacional en materias espaciales.

Chile superó los 16 millones de dosis administradas de vacuna contra SARS-CoV-2

El ministro de Salud, Enrique Paris, informó que “se han administrado 16.059.122 de dosis de vacuna contra COVID-19. De los cuales 8.765.052 son personas con primera dosis y 7.294.070 son personas vacunadas que ya completaron sus dos dosis”.

El ministro Paris señaló que “la población objetivo es 15.200.840 de personas, donde un 57,7% de la población se ha vacunado con primera dosis y un 48% de la población se ha vacunado con segunda dosis”.

De acuerdo con los datos entregados por el Departamento de Estadística e Información de Salud, hasta ayer martes 11 de mayo, hasta las 19.59hrs, se inmunizaron 183.262 personas, de los cuales 102.319 son primera dosis y 80.943 con segunda dosis.

El jefe de la cartera detalló además que “3.013.247 personas mayores de 60 años y más han participado en la campaña. Respecto al género, el 53,8% de los inoculados corresponde a mujeres y el 46,1% son hombres”.

<El ministro Paris hizo un especial llamado a la población a seguir con el proceso de vacunación según el calendario, “mientras continuamos con la inoculación, la ciudadanía debe mantener las medidas de autocuidado porque por ahora siguen siendo las más efectivas para evitar nuevos contagios”.

Académicos destacan el legado del fallecido biólogo y filósofo Humberto Maturana

Este jueves, a la edad de 92 años, falleció el destacado biólogo, filósofo y escritor chileno, Humberto Maturana, galardonado en 1994 con el Premio Nacional de Ciencias. Al respecto, el académico del Departamento de Historia de la Universidad de Santiago, Maximiliano Salinas, destacó haber podido compartir con él en vida.

“Su apuesta fue una saludable invitación a pensar la humanidad desde aspectos olvidados o escamoteados, como el amor y el juego”, apuntó. “Su invitación al conocimiento de la humanidad desde estas dimensiones fue un permanente desafío para nuestra disciplina, tantas veces más impresionada por las expresiones y las huellas de la cultura patriarcal en la historia”, sostuvo.

El doctor en teología comenta que Maturana colaboró con uno de sus equipos de trabajo y participó en la presentación del libro ‘Lo que puede el sentimiento. El amor en las culturas indígenas y mestizas en Chile y América del Sur, siglos XIX y XX’, del cual Salinas es coautor junto a Jorge Rueda, Consuelo Hayden y Daniel Sierra.

“Nos animó, y nos lo sigue haciendo, a imaginar un mundo imprevisto, como fue su ofrecimiento a integrarse a la investigación historiográfica. Un sabio a toda prueba. Reitero la alegría de su presencia que su deceso no detiene. ¡Una honra para Chile y para todo el mundo!”, enfatizó el profesor de la Usach.

Por su parte, la académica del Departamento de Filosofía de la U. de Santiago, doctora en filosofía y experta en bioética, Diana Aurenque, resaltó el legado de Maturana en conversación con el programa Estación Central de Radio Usach. “Demostró lo fundamental del respeto y productividad que puede tener la interdisciplina”, sostuvo. 

“Uno de sus aportes más importantes es esta apertura de no pensar la vida desde teorías estrictamente biológicas”, agregó la filósofa. “Tomó conceptos que para la ciencia eran abstractos y hoy son útiles para explicar cómo funcionan los organismos vivos y hasta el sistema neurológico”, detalló.

Finalmente, Aurenque resaltó que “desde su reflexión como biólogo y científico, uno de los pilares que tiene es que la objetividad y la verdad no existen. Él era un intelectual comprometido con su entorno, que dialogaba con la realidad y, en ese sentido, era profundamente político”. Maturana fue nombrado Doctor Honoris Causa de la Universidad de Santiago de Chile en 2009.

Estudio evidencia más disposición de los hombres a vacunarse y más vacunación efectiva a mayor nivel socioeconómico

“¿Quienes se están vacunando y qué factores explican la disposición a vacunarse contra el COVID-19? Un análisis para comprender las principales barreras”, es el nombre de la nueva entrega del MOVID-19, informe de la Universidad de Chile y del Colegio Médico de Chile, en conjunto con académicos de la Universidad Diego Portales, Universidad San Sebastián y Universidad Central, que en esta nueva entrega ahonda en las barreras a la vacunación contra el COVID-19 en Chile.

A nivel global, un 70 por ciento de las personas entrevistadas en MOVID-IMPACT refirieron disposición a vacunarse. Las principales razones reportadas en aquellos que indicaron reticencia fueron posibles efectos adversos (18,5 por ciento), dudas en la efectividad (10,9 por ciento) y dudas provocadas por el rápido desarrollo de la vacuna (10,3 por ciento); mientras que las que fueron mencionadas en menor medida son miedo al contagio (2 por ciento) y no creer en las vacunas (1 por ciento).

Uno de los resultados del estudio aplicado a más de 7 mil personas de grupos prioritarios, es que en comparación con las mujeres, los hombres de estos sectores de la población al momento de la encuesta MOVID-19 se han vacunado menos. Como detalla el informe, “este hallazgo es preocupante, en tanto existe evidencia convincente que indica que los hombres tienen una mayor probabilidad de cursar con enfermedad grave y morir de COVID-19”.

El factor socioeconómico es otra variable determinante: las personas con estudios universitarios se vacunan más frecuentemente que el resto. Como detalla María José Monsalves, académica de la Facultad de Odontología de la Universidad de Chile, “por ejemplo, personas con una educación técnica, tienen  22 por ciento más posibilidad de estar dispuestos a vacunarse que aquellos que tienen educación media o inferior; y aquellos que tienen una educación profesional, hasta un 60 por ciento”. A esta disposición, se suma que las personas afiliadas a ISAPRE tienen entre un 5-16 por ciento más posibilidades de haberse vacunado que las personas afiliadas a FONASA.

Otro aspecto es que las personas que viven en la Región Metropolitana se vacunan menos que el resto, pese a que muestran mayor disposición a hacerlo. Esto, plantea el reporte, no se explica por disposiciones individuales. “Si bien no es clara la explicación de este fenómeno, esto podría relacionarse con procesos menos expeditos de vacunación en la ciudad de Santiago”, como serían restricciones por horarios de trabajo, o la dificultad para transportarse sin riesgos hasta los vacunatorios.

Un aspecto a considerar en torno a la disposición a vacunarse tiene que ver con las creencias. El reporte explicita que “las personas que confían más en las medicinas alternativas que en la medicina convencional se vacunan menos. De modo similar, las personas que creen que la pandemia responde a un acto planificado tienden a no vacunarse”. A esta dimensión se suma el efecto de la desconfianza en el actual gobierno: “en la medida en que las personas desconfían del interés del gobierno por cuidar de la salud de la población, disminuye la disposición a vacunarse. Este efecto, sin embargo, es menor al de las otras dos disposiciones”.

Finalmente, y como destaca el profesor de la Universidad Central y coautor del estudio, Ismael Puga, las personas tienden a vacunarse con mayor probabilidad si creen que su entorno valida y refuerza la importancia de vacunarse. En cambio, la percepción individual de riesgo frente a la pandemia no es un factor significativamente relevante, y sólo afecta la decisión de vacunarse cuando va acompañada de esta norma social.

Esto último evidencia “la relevancia de la norma social, es decir, es la relevancia de que las personas sientan y crean que en su entorno, su familia, sus amigos y todos a su alrededor están de acuerdo en que hay que vacunarse”.

Ante esto, señala, es crucial instalar socialmente “la idea de que es una tarea colectiva, lo que empuja a las personas, incluso a las que individualmente tienen dudas sobre el proceso, a vacunarse. En ese sentido es importante que todo tipo de campaña o todo tipo de comunicación no se oriente a cuestionar la disposición de la ciudadanía o culparla, sino que por el contrario, se refuerce esta idea –que por lo demás es real- de que este es un proceso y un objetivo colectivo”.

Ante el avance del proceso de vacunación a personas de menor rango etario, las barreras identificadas en este estudio se hacen más relevantes, señalan las y los especialistas. Así lo indica el Dr. Cristóbal Cuadrado, académico de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile y parte del equipo MOVID-19. “En la medida que comiencen a vacunarse grupos de edad más jóvenes, y que por tanto en mayor proporción son económicamente activos, esto se va a volver un problema más importante para la estrategia de vacunación, y por tanto es necesario entregar cada vez más garantías para las trabajadoras y trabajadores para que puedan vacunarse. Asimismo, debe potenciarse una estrategia que se acerque a la comunidad y lugares de trabajo. Una campaña de vacunación no puede ser solo sentarse a esperar que la gente acuda a los centros de salud”, manifestó el experto.

“Esperamos que estos resultados sean valiosos para informar las decisiones del Gobierno y el Ministerio de Salud en las estrategias para impulsar el plan de vacunación COVID-19 en Chile”, concluye el informe.

La información sobre vacunación efectiva se recabó en el último módulo temático del panel online del Monitoreo Nacional de Prácticas y Síntomas COVID19 – MOVID-19  entre el 11 y el 16 de marzo del año 2021, para el cual participaron más de 7 mil personas de grupos prioritarios del programa de vacunación.

Estudio de geología identifica qué nutrientes minerales de la roca y suelo son traspasados a la uva de vino

La investigación “Biogeoquímica de los nutrientes minerales esenciales de las plantas a través de la roca, suelo, agua y frutos en viñedos de Chile Central”, publicada en la Revista CATENA, analizó la composición química de la roca madre, el suelo, las bayas y las aguas en cuatro cuencas vitícolas del centro de Chile, para determinar la influencia de los nutrientes minerales del suelo en la producción de vid.

El estudio, liderado por la investigadora de la U. de Chile, Pamela Castillo, estableció que potasio, sodio, hierro, cobre y magnesio, son elementos que en altas concentraciones en el suelo  se traspasan a la planta y pueden ser encontrados en la uva. 

“Nos preguntamos si la geoquímica de la roca a partir de la cual se desarrolla un suelo, de alguna manera influye a la química inorgánica de la uva, considerando que además la química de las aguas de lluvia, de riego y subterránea, también podría influir. Analizamos entonces la química de la roca, la química del suelo, la química de las aguas y finalmente, la química de la uva. Encontramos que hay algunos elementos que influyen más que otros. Por ejemplo, descubrimos que el calcio, magnesio y fósforo son altos en las uvas de Pinot Noir, mientras que el potasio y el azufre son altos en las uvas de Carmenere, independiente de la ubicación del viñedo o la geología de éste. Sin embargo, los micronutrientes cobre, zinc, hierro y manganeso, poseen un comportamiento particular en las bayas de diferentes viñas, indicando la influencia de la geología y del medioambiente en la química de las uvas”, explica Castillo.

Al analizar la composición mineralógica y geoquímica de rocas y suelos en dos viñedos que cultivan la cepa Pinot Noir en los valles de Casablanca y San Antonio, como también dos viñedos para Carmenere en los sectores de Santa Cruz y San Javier, se estableció que la composición mineralógica puede variar dentro del mismo terreno.

“Estos análisis permitirían fertilizar de una manera mucho más sectorial, dentro de un mismo cuartel, que es un área donde se plantan parras de una misma cepa y edad. Entender la química de suelos nos permitiría fertilizar de manera óptima y más específica”, comenta la académica. Por ejemplo, en un cuartel estudiado dentro de una viña,  el equipo investigador encontró un dique de una roca llamada aplita, que es rica en potasio, y las uvas de las plantas que crecían sobre ese dique, efectivamente tenían un alto contenido en potasio, con valores contrastantes respecto del resto de las uvas analizadas en ese cuartel. En tanto, en otra viña habían dos perfiles de suelo que presentaban una capa de conglomerado con altas concentraciones de hierro y zinc y en este caso, las uvas analizadas sobre ese suelo, también estaban enriquecidas en estos dos elementos.

El profesor asociado del Departamento de Geología y director del proyecto “Influencias geológicas, mineralógicas y geoquímicas en el cultivo de la vid en Chile”, financiado por el Consorcio I+D Vinos de Chile y CORFO, Brian Townley, participó también de la investigación, junto a Ignacio Serra, Felipe Aburto, Sofía López, Joseline Tapia y Muriel Contreras de las universidades de Concepción y Católica del Norte. 

Para Townley el desarrollo de conocimiento referentes a las influencias geológicas, mineralógicas y geoquímicas en la viticultura, en conjunto con modelos predictivos de clima (asociado con otro proyecto del mismo Consorcio), permitiría al sector agrícola en general, evaluar requerimientos de nuevos predios para efectos de migrar o modificar tipos de cultivo en función del avance del cambio climático. Esto último se encuentra desarrollado en la plataforma digital del Consorcio, VitisGeoClima. 

“En el caso de los vinos premium, contar con propiedades específicas del sitio permite establecer condiciones de especificidad, las que hacen un producto único, que no puede ser producido en un sitio distinto. Estas propiedades, en vinos de alta gama y producción limitada, agregan valor al producto, aspectos que se buscan establecer en este negocio”, sostiene Townley.

El estudio de las características geológicas y geomorfológicas de entorno y sustrato en regiones agrícolas, entrega información estratégica referente a las propiedades geológicas regionales y locales.

“En la agricultura en general se puede relacionar con aspectos agrícolas, tipos y calidad de suelos, drenaje y disponibilidad de agua, tipo y calidad de aguas, entre otros; que definen la aptitud de suelos agrícolas para algún tipo de cultivo específico. Al combinar estas propiedades de sitio con el clima, en el actual escenario de cambio climático, se pueden definir entonces criterios para la evaluación y búsqueda de predios agrícolas óptimos.  Concepto que se desarrolló en la plataforma digital del Consorcio I+D Vinos de Chile, VitisGeoClima, quienes apoyaron este estudio en particular”, aclara Townley.

Investigadores descubren un nuevo mamífero de la Era de los Dinosaurios en la Patagonia

Entre 74 a 72 millones de años de antigüedad tendría esta especie nombrada Orretherium tzen por científicos de la Red Paleontológica de la Universidad de Chile, Sergio Soto y Alexander Vargas, junto a investigadores argentinos y del Instituto Antártico Chileno. El estudio del fósil, publicado por Scientific Reports del grupo Nature, permitió determinar que se trataría de un mamífero de aspecto, proporciones y hábitos alimenticios similares a los de zorrillos modernos como el chingue. Este nuevo mamífero se suma al hallazgo del Magallanodon baikashkenke, realizado el año pasado en la misma zona de Magallanes.

Hasta el año pasado no habían registros fósiles de mamíferos de la Era de los Dinosaurios en Chile y los más antiguos que se conocían databan de hace unos 38 a 46 millones de años atrás. Esa historia cambió a mediados del 2020 con la divulgación del hallazgo del Magallanodon baikashkenke, especie de apariencia similar a un coipo a la que ahora se suma el Orretherium tzen, un nuevo mamífero que habitó la Patagonia chilena hace unos 72 a 74 millones de años, en el Cretácico superior, a fines del Mesozoico.

El descubrimiento, publicado por Scientific Reports del grupo Nature, fue realizado en el Valle del Río de Las Chinas, en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, por los científicos de la Red Paleontológica de la Universidad de Chile, Alexander Vargas y Sergio Soto, junto a un equipo de investigadores argentinos y del Instituto Antártico Chileno. 

Este nuevo mamífero, que cohabitó con el Magallanodon baikashkenke y dinosaurios como el titanosaurio, habría tenido un aspecto, proporciones y hábitos alimenticios similares a los de zorrillos modernos como el chingue. Así lo determinaron los investigadores a partir del fragmento de mandíbula con piezas dentales que permitió su identificación. “Este mamífero es un linaje primitivo del grupo de los meridioléstidos, muy exitosos al final de la Era de los dinosaurios en Sudamérica. La mandíbula encontrada cuenta con cinco piezas dentales en su lugar que indica hábitos omnívoros, probablemente se alimentó de plantas e insectos”, detalla Sergio Soto.

El origen de su nombre Orretherium tiene dos raíces: Orre significa “dientes” en  Aonikenk, y therium significa “bestia” en griego, una terminación frecuentemente usada en géneros de mamíferos. Por otro lado, la especie tzen significa “cinco” en Aonikenk, en referencia a la preservación de los cinco dientes consecutivos en la mandíbula. 

Si bien los primeros mamíferos aparecieron durante la primera mitad del Mesozoico, hace unos 180 millones de años, aún conocemos muy poco sobre la historia de este grupo durante esta era. Restos de dinosaurios hallados en América del Sur se conocen desde el siglo XIX, sin embargo, restos óseos de mamíferos de esta misma edad geológica recién fueron encontrados a inicios de la década de 1980. En este sentido, “los fósiles encontrados en Chile son sumamente importantes para entender el rompecabezas de la historia evolutiva de los mamíferos durante la Era de los dinosaurios”, afirma Agustín Martinelli, paleontólogo del Conicet y del Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia.

Alexander Vargas, académico de la Facultad de Ciencias de la U. de Chile y director del Proyecto Anillo Registro Fósil y Evolución de Vertebrados, plantea que “la evolución de los mamíferos durante la Era de los Dinosaurios es aún muy desconocida y cada descubrimiento de una especie nueva es un avance que llama la atención a nivel mundial. La nueva especie chilena Orretherium tzen es de especial relevancia para discutir el origen evolutivo de una importante familia de mamíferos, los mesungulátidos, y la excelente preservación de los fósiles, sumado al descubrimiento previo de Magallanodon, ubica a Magallanes como nuevo foco de atención mundial para futuros avances en evolución de los mamíferos”.

Este nuevo hallazgo reafirma la importancia paleontológica del yacimiento del Valle de Las Chinas y su potencial para la preservación de micromamíferos, apunta Sergio Soto, “lo que es importante, porque son un grupo poco conocido en el registro fósil. Se conoce mucho más de los dinosaurios, reptiles y otros grupos abundantes en el mesozoico, pero poco se conoce de los mamíferos, y -sin embargo- los mamíferos se remontan evolutivamente hasta casi el origen de los dinosaurios”.

A futuro, agrega, profundizarán sobre la relación de esta especie con otros merilodéptidos sudamericanos, particularmente de Argentina, para entender si es una forma derivada o ancestral y cómo estos animales llegaron a Magallanes.

Durante fines de la Era Mesozoica los ecosistemas terrestres eran notoriamente diferentes a los actuales y los fósiles que se encuentran en rocas cretácicas de Magallanes nos están develando una historia fascinante, justo en el momento anterior a la gran extinción de los grandes dinosaurios y otros reptiles (como por ejemplos los pterosaurios y mosasaurios). En este sentido, el paleobiólogo y director del Instituto Antártico Chileno, Marcelo Leppe, destacó la imagen que cada hallazgo nos va aportando para conocer este ecosistema compuesto por “bosques remanentes de las floras del megacontinente Gondwana, pobladas de una diversidad única de dinosaurios, reptiles, mamíferos, moluscos y aves”.