Los países de la Amazonía han dado un paso crucial hacia un futuro más sostenible. En una reunión organizada por la OTCA y la FAO en Belém, Brasil, se acordó elaborar una estrategia conjunta para mejorar la seguridad alimentaria y nutricional en la región. Esta iniciativa busca transformar los sistemas agroalimentarios amazónicos, haciéndolos más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles.
Un aspecto fundamental de esta estrategia es el fortalecimiento del Observatorio Regional Amazónico (ORA). El ORA será una herramienta invaluable para recopilar y gestionar información territorial, proporcionando datos cruciales para la toma de decisiones y la formulación de políticas públicas. Con esta información, los países de la Amazonía podrán desarrollar planes y programas más efectivos para abordar los desafíos de la región.
Además, se busca garantizar que las comunidades rurales de la Amazonía tengan acceso a servicios digitales como internet y plataformas en línea. Esta conectividad permitirá a estas comunidades participar plenamente en la bioeconomía,ampliando sus oportunidades y mejorando su calidad de vida.
Otro eje central de la estrategia es la gestión sostenible de los recursos naturales, especialmente las cuencas hídricas y los recursos pesqueros. Al promover una gestión conjunta de estos recursos, los países de la Amazonía podrán garantizar su conservación a largo plazo y aprovecharlos de manera más equitativa.
La Iniciativa Mano de la Mano de la FAO también jugará un papel importante en esta transformación. Esta iniciativa promueve la infraestructura digital, el desarrollo de habilidades digitales y la trazabilidad de los productos, lo cual es fundamental para mejorar la competitividad de los productos amazónicos en los mercados nacionales e internacionales.
En resumen, los países de la Amazonía están trabajando de manera conjunta para construir un futuro más sostenible y próspero para la región. Al fortalecer la cooperación regional, invertir en tecnologías digitales y promover prácticas sostenibles, se busca garantizar la seguridad alimentaria, mejorar la calidad de vida de las poblaciones amazónicas y conservar los valiosos recursos naturales de esta región.