Santiago volvió a convertirse en el centro de gravedad del documental latinoamericano con el cierre de la edición 29 de FIDOCS, un festival que este año apostó por lecturas profundas del colonialismo, la memoria histórica, los conflictos geopolíticos y la crisis ambiental. La ceremonia de clausura llenó por completo la Sala K / U. Mayor, donde se anunciaron los filmes ganadores antes de la exhibición de With Hasan in Gaza, del cineasta palestino Kamal Aljafari, un cierre cargado de reflexión sobre resistencia y memoria, que tendrá una nueva función en Centro Arte Alameda – Sala CEINA.

La edición 2025 desplegó más de 60 películas en sus distintas secciones, sumando estrenos nacionales, focos dedicados a Jessica Sarah Rinland, Su Hui-Yu y Cecilia Mangini, una muestra especial de Docudays UA, funciones al aire libre y exhibiciones de referentes como Lucrecia Martel, Werner Herzog, Laura Poitras y Gianfranco Rosi. La programación configuró uno de los años más amplios y diversos del festival, reforzando el lugar de FIDOCS como una plataforma clave para el cine de lo real en la región.

Entre los reconocimientos más destacados estuvo Esa otra selva blanca, de Teresa Arredondo, que se llevó el premio a Mejor Película en la Competencia Nacional. El jurado, compuesto por Yuliia Kovalenko, Carlos Flores y Alicia Cano, señaló que la obra “propone una estrategia narrativa audaz que se desvía y vuelve al tono central instalándose en una deriva que nos recuerda con sutileza que somos presente y memoria”. En la Competencia Internacional, el máximo galardón recayó en Partition, de Diana Allan, reconocida por ser “una obra de profunda sensibilidad, claridad política y valentía cinematográfica, una reflexión devastadora y necesaria sobre el genocidio palestino”.

La Competencia Internacional otorgó además una Mención Especial a Shifting Baselines, de Julie Elie, destacada por mostrar “cómo un solo fragmento de metralla puede dejar cicatrices en la tierra y desplazar permanentemente a las especies, alterando el terreno sobre el que se asienta nuestro sentido de la realidad”. Mientras tanto, en Cortos Emergentes, el premio mayor fue para Secreto de cabeza, de Matía Lorenzo, elogiado por su manera de unir archivos disímiles para adentrarse en la subjetividad de un paciente psiquiátrico. La Mención Especial fue para Te llamarás Pablo, de Pablo Vergara E., una obra que “abre un espacio de diálogo entre la memoria familiar y la historia del país”.

El reconocimiento a Mejor Ópera Prima recayó en Al oeste, en Zapata, de David Bim, una película destacada por un lenguaje cinematográfico que prescinde del cuerpo del cineasta para ceder protagonismo a encuadres precisos, un montaje envolvente y un diseño sonoro que construye una atmósfera hipnótica. Este premio fue entregado por el Jurado Joven, conformado por estudiantes de cine de todo Chile y presidido por Roberto Collío, cuya lista completa está disponible en el sitio oficial del festival.

Con esta edición, FIDOCS reafirma su vocación: ser un espacio crítico, diverso y contemporáneo para pensar el mundo a través del cine documental, un lugar donde las nuevas miradas dialogan con las urgencias globales y donde cada premiación refleja, más que una tendencia, una postura frente al presente.