El Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria (SPEL) de la Universidad de Chile ha lanzado una invitación abierta a la ciudadanía para formar parte de un innovador proyecto destinado a monitorear la calidad del aire en la Región Metropolitana. El objetivo es crear el primer mapa temporal preciso de alta resolución de aerosoles en Chile y América Latina.

A menudo se asocia el término “aerosoles” con productos como sprays y desodorantes, pero en realidad se refiere a partículas en suspensión en el aire, como la contaminación generada por vehículos, la quema de leña, incendios forestales y cenizas de erupciones volcánicas. Los aerosoles tienen un impacto significativo en la salud humana y el medioambiente, además de estar relacionados con el derretimiento de glaciares.

El proyecto del SPEL busca comprender cómo se desplazan y transportan los aerosoles en áreas densamente pobladas como la Región Metropolitana. Para ello, se utilizarán fotómetros, instrumentos desarrollados en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, que serán distribuidos por toda la región para realizar mediciones precisas.

Estos fotómetros, similares a lámparas de velador y con un peso inferior a dos kilos, miden la intensidad de luz solar para determinar la cantidad de aerosoles presentes en la atmósfera. Los instrumentos deben ubicarse en lugares donde reciban luz solar durante todo el día, como techos y azoteas.

El proyecto comenzó en 2023 con una fase piloto que involucró a diez establecimientos educacionales y 177 voluntarios. Esta etapa permitió a grupos escolares participar en mediciones, contribuyendo a mejorar el diseño de los instrumentos y la red de monitoreo. Ahora, el objetivo es expandir el proyecto para alcanzar 50 puntos de medición en toda la región.

Marcos Díaz, coordinador de SPEL, destacó la importancia de sumar más voluntarios de todas las comunas de la Región Metropolitana. “Los desafíos ambientales requieren la colaboración de distintos actores. Esta iniciativa busca crear un puente entre la sociedad y la ciencia”, afirmó Sofía Vargas, una de las coordinadoras del proyecto.

Los voluntarios participarán en sesiones de capacitación sobre el uso de los instrumentos y el impacto de los aerosoles. Además, deberán instalar el equipo de medición en sus viviendas o lugares de trabajo durante un mes.

Para unirse a esta histórica medición y contribuir a un futuro más sostenible, los interesados pueden inscribirse en línea a través de un formulario proporcionado por el equipo SPEL de la Universidad de Chile. Esta es una oportunidad única para participar en un proyecto de ciencia ciudadana y ayudar a mejorar la calidad del aire en la región.