Medio Ambiente

Estudio busca fomentar el reciclaje de envases con escasa tasa de revalorización

En septiembre, comenzarán a regir las obligaciones de reciclaje de envases y embalajes plásticos en el marco de la Ley REP. Aunque en Chile se registran avances, uno de los principales desafíos lo presenta el polipropileno flexible, comúnmente usado como envase de arroz, tallarines, hamburguesas, galletas, snacks, embalaje secundario, entre muchos otros productos.

Aunque se trata de un material reciclable, actualmente no existen canales de recolección estables y universales. Según un estudio de ASIPLA, en colaboración con SOFOFA y otras organizaciones, la valorización de este tipo de material posconsumo domiciliario representa apenas el 1,1% de las más de 23 mil toneladas que anualmente se presentan en el mercado chileno.

Sin embargo, un estudio del investigador del Centro de Innovación en Envases y Embalajes (LABEN-CHILE) de la Universidad de Santiago de Chile y de la plataforma de innovación Co-Inventa, Eliezer Velásquez, busca mejorar las propiedades de este tipo de envases de uso domiciliario para fomentar su reciclaje. En palabras del especialista, “busca mejorar las propiedades físico-mecánicas del polipropileno reciclado flexible mediante el uso de nanotecnología”.

El proyecto Fondecyt 11220469 contempla colaboraciones con instituciones de distintos países. El año pasado, con el Departamento de Ciencias Químicas de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires, y con el Instituto de Investigaciones en Ciencia y Tecnología de los Materiales de la Universidad Nacional de Mar del Plata (Argentina).

Este año, la iniciativa comenzó su segunda etapa, estableciendo redes de colaboración con el Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España, y con la Universidad de Zaragoza. La tercera y última parte del proyecto está programada para 2024.

De acuerdo con Velásquez, ingeniero químico y doctor en ingeniería, una de las razones de las bajas tasas de recolección y reciclaje del envase flexible se debe al bajo peso en relación a su superficie, y es muy fácil de filtrar en el medioambiente. El estudio busca que el material no pierda sus propiedades físicas y mecánicas, que lo hacen menos competitivo que un “plástico virgen”, mejorando sus propiedades “barrera”.

El objetivo es que este plástico mantenga lo mejor posible las cualidades que le permitirían, por ejemplo, retrasar el proceso de deterioro en el caso de una potencial aplicación en envases de alimentos. “Para que las empresas reciclen y lo utilicen, para hacer nuevos productos, se les complica; al reprocesarlos, pierden su propiedad original”, señala. Por eso, se busca reforzar el material. “Se están haciendo mezclas con aditivos como nano-refuerzos, para mejorar las propiedades”, afirma.

Finalmente, el especialista anuncia que, en su tercera etapa, la iniciativa estudiará el efecto del reciclado del prototipo que resulte con mejores cualidades. “Se va a reprocesar a escala piloto para evaluar su desempeño”, concluye.

Se realizará la primera y mayor conferencia latinoamericana para mujeres en energía

Chile será sede de la mayor conferencia sobre género y energía de Latinoamérica, la cual busca crear espacios de reflexión y construcción de propuestas públicas y privadas, desde y para la región, orientadas a la mayor participación de mujeres en este sector, al abordar la importancia de la educación y la construcción curricular en la igualdad de género en el ámbito energético.

El evento, denominado 1ª Conferencia Latinoamericana #CEGEN LAC 2023 (Capacidades de Cambio y el Empoderamiento de Género en Energía), se realizará el próximo 10 de mayo, y es organizado por el Ministerio de Energía de Chile y el Ministerio de Economía y Acción Climática de Alemania (BMWK) a través de la Energy Partnership Chile – Alemania, junto a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ).

La cita contará con panelistas de gran trayectoria en investigación, política, educación, género, ciencia y energía, quienes expondrán en paneles de 60 minutos cada uno, siendo transmitido vía streaming a todo el mundo.

El primer panel, se enfocará en la importancia de la educación para la vida y en la presencia de sesgos de género en la primera infancia e inserción laboral. Se analizarán las brechas de género en la educación STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), y se discutirán las barreras que enfrentan las mujeres en su acceso y permanencia en el mercado laboral energético, entre otros.

En el segundo panel se presentará el estudio “Barreras de género en I+D en el ámbito energético”, el cual entrega una mirada sobre la inclusión en este sector.

Para el tercer panel, los panelistas abordarán cómo realizar cambios estructurales que permitan avanzar en políticas de género y el rol de la industria, presentando iniciativas y políticas públicas de género implementadas en la región.

La transmisión vía streaming permitirá que personas de todo el mundo puedan participar y conocer las estrategias para fomentar la igualdad de género en la industria de la energía.

 

“Inyección” controla invasión de pinos en bosques nativos

Erradicar árboles de pino adulto (Pinus radiata) que invaden relictos del bosque maulino, de una forma eficiente y de mínimo impacto en el medioambiente, fue el objetivo de una investigación liderada por el académico y director de Investigación de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile, Dr. Juan Pablo Fuentes. El trabajo fue desarrollado en el marco de un proyecto asociado al Fondo de Investigación del Bosque Nativo, el cual es administrado por la Corporación Nacional Forestal (CONAF), y se implementó en la Reserva Nacional Los Ruiles y en la Estación Experimental Justo Pastor León de la Universidad de Chile, ambas ubicadas en la región del Maule.

El proyecto, titulado “Técnicas innovadoras de control de Pinus radiata en bosques de Nothofagus de la Región del Maule: buscando soluciones económico-ambientales factibles” (Proyecto CONAF 018/2018), determinó que la aplicación de una dosis mínima; en términos de cantidad y concentración, de un herbicida de la familia de las sulfonilureas, a través de una perforación de aproximadamente siete centímetros de longitud y 2 cm de diámetro, permite la muerte de un pino en unos pocos meses sin generar un impacto ambiental que afecte el crecimiento y desarrollo de las especies nativas de la zona, así como las funciones ecológicas de los ecosistemas estudiados.

“El árbol empieza a desmoronarse lentamente, no provocando daño en la vegetación nativa y esta, a su vez, empieza a ocupar el espacio que tenía el árbol invasor controlado. Entonces, se recupera el ecosistema original. Esto lo pudimos comprobar, la vegetación nativa está volviendo a ocupar su espacio”, destaca el Dr. Fuentes sobre esta investigación que duró cerca de cuatro años. El académico detalló que, mediante este procedimiento, el árbol tratado dentro de un período de tres a seis meses se marchita. En ese período, el árbol se deseca y pierde el 75% de su peso, lo que favorece una caída al suelo más liviana y sin dañar las especies nativas que lo rodean. 

“Corroboramos que las dosis que teóricamente aparecían en la literatura científica daban resultado, pero comenzamos un proceso en que analizamos diferentes herbicidas y en dosis de mucho menor concentración. Realizamos además una serie de pruebas para determinar si el herbicida aplicado al fuste generaba algún efecto residual o impactos no solo en la vegetación nativa, sino que también en los microorganismos, no encontrando efectos”, complementa el académico.

Son diversos los impactos que han traído las plantaciones de pino en Chile. Sin duda, las plantaciones de Pinus radiata han contribuido a dar un nuevo brío a las economías regionales a partir del uso de terrenos anteriormente degradados por una agricultura mal implementada en siglos anteriores. Sin embargo, la ampliación de las plantaciones a zonas de bosques nativos, con sustitución incluida, ha generado impactos negativos asociados a la pérdida de hábitat y de fuentes de nutrientes para animales silvestres; alteración en la interacción entre plantas y animales; cambios en comunidades microbianas y, por ende, en los ciclos de nutrientes; alteración en el ciclo hidrológico interno y; finalmente, la fragmentación de los remanentes del bosque nativo original. Esto ha favorecido la invasión de pinos, al estar los fragmentos rodeados de este monocultivo foresta, a lo que se suma un paisaje dominado por esta especie exótica y que se ha relacionado en los últimos años con la rápida propagación de los incendios forestales. 

“Los efectos de la invasión de Pinus radiata son muy visibles en la Región del Maule. En la mayoría de los casos, los remanentes del bosque nativo original están sumamente degradados y fragmentados, por lo tanto, los procesos de invasión son mucho más intensos”, detalla el profesor Fuentes al referirse a los impactos de este árbol exótico en esta zona tan afectada y que fue una de las motivaciones para situar en ella esta investigación.

La ingeniera forestal, Daniela Celedón, quien fue parte del estudio, agrega que “el principal beneficio de esta investigación es la entrega de conocimiento y herramientas que permiten contribuir de manera concreta al manejo de la invasión de Pinus radiata en áreas de alto valor ecológico, teniendo un gran impacto, dada la necesidad que había en esta materia y especialmente bajo el actual escenario de cambio climático, el cual promueve la invasión de especies exóticas”. Plantea, además, que “la aplicación a nivel nacional de esta metodología estará determinado principalmente por los recursos económicos con los cuales se cuenten para el manejo del control de la invasión de especies exóticas”.

Con los resultados obtenidos, se desarrolló la “Guía para el control de pinus radiata en áreas de alto valor ecológico”, un insumo importante para entidades públicas y empresas privadas en el tratamiento y control de Pinus radiata. Tanto es así, explica el profesor Fuentes, que este procedimiento específico para árboles adultos de pino podría aplicarse sin inconvenientes en otras áreas con bosque nativo en que sea necesario controlar esta especie invasora.

Geóloga U. de Chile cuenta cómo encontraron nuevo moai en laguna seca del volcán Rano Raraku

El incendio ocurrido en Isla de Pascua en octubre de 2022, que afectó cerca de sesenta hectáreas en el humedal del volcán Rano Raraku, llamó tristemente la atención del mundo ¿Cómo era posible que se quemara? El evento alertó a la comunidad local y a las autoridades, quienes convocaron al mundo académico para entender lo que había pasado con este humedal ubicado en una zona de lluvias abundantes.

Fue esa interrogante la que motivó a la geóloga de la Universidad de Chile, Carolina Gómez, a realizar un voluntariado científico en la isla. Con la idea de que el desastre era atribuible al cambio climático, organizó a un equipo de diez estudiantes geología y geofísica de la Universidad de Chile, U. Andrés Bello y U. de O’Higgins y, con el apoyo de estos planteles, más la Corporación Nacional Forestal (Conaf) y la comunidad local, partieron en el mes de enero rumbo a la isla.

“El plan original era realizar estudios sobre peligros geológicos en la zona, obtener información climática y organizar actividades de difusión con la comunidad”, relata la profesional. El grupo de voluntarios convocado por Carolina Gómez y Gabriela Barraza estuvo seis semanas realizando estudios geológicos (peligros geológicos, mapeo de fracturas, análisis litológicos), climáticos (mapas de drenaje, estudios de paleoclima y modelos climáticos) y actividades de difusión a la comunidad (charlas de capacitación para guías turísticos y exposiciones para la comunidad). “La comunidad se mostró muy agradecida por nuestro trabajo”, afirma.

Sin embargo, lo que comenzó como un proyecto de carácter geológico cambió por completo el día 21 de febrero pasado, cuando tres de los miembros del equipo (Matías Silva, Luis Godoy y Vicente Castro) descubrieron el famoso moai que luego fue noticia mundial. “Uno de los grupos estaba siguiendo una serie de grietas en la zona del humedal cuando se topan con un moai tendido en el suelo”, cuenta Carolina Gómez.

El aviso del hallazgo, dado por vía telefónica desde la cumbre del Rano Raraku, generó un pequeño revuelo en la comunidad, que llegó con equipos arqueológicos a revisar lo que se había encontrado. “Fue muy bonito porque la comunidad se involucró de inmediato, se realizó una ceremonia para reconocer este descubrimiento”, recuerda. En cosa de días, la noticia apareció en la prensa nacional e internacional, ya que este moai -avistado por casualidad- no estaba presente en los registros arqueológicos de la isla.

“Este hallazgo viene a coronar este primer voluntariado, que fue muy provechoso, tanto desde el punto de vista académico y de la investigación, como social y educativo. Y nos indica que queda mucho trabajo por hacer en la isla, en temas arqueológicos y, principalmente, en aspectos geológicos”, afirma la académica del Departamento de Geología de la Universidad de Chile, Valentina Flores.

Aunque la Isla de Pascua tiene un enorme atractivo arqueológico, la zona es también un lugar de enorme atractivo para los investigadores de las ciencias de la tierra. Su peculiar ubicación, en la mitad del Océano Pacífico y a miles de kilómetros del asentamiento humano más cercano, la transforman en un lugar ideal para realizar estudios relacionados al cambio climático, vulcanología e hidrología, entre otros.

“Por ejemplo, la isla es el único sitio en miles de kilómetros a la redonda donde podemos obtener muestras profundas de sedimento para estudiar. Más tarde, ya en el laboratorio, podemos hacer estimaciones sobre cómo eran los vientos y las lluvias en el pasado analizando las características de los sedimentos presentes en esas muestras”, explica la profesora Flores.

El Fondo Verde aprobó US$ 33,3 millones en donación para combatir el cambio climático en Bolivia

El Fondo Verde para el Clima (FVC), en su Junta número 35 celebrada en Corea del Sur, aprobó un financiamiento por US$ 33,3 millones en donación para el Estado Plurinacional de Bolivia. Los fondos serán destinados a incrementar la resiliencia a la sequía y otros fenómenos extremos del cambio climático, en pequeños agricultores de la Macro Región Valles, incluyendo a los departamentos de Potosí, Chuquisaca, Cochabamba, Santa Cruz y Tarija.  

El proyecto, denominado “Incremento de la Resiliencia Climática basada en Ecosistemas de Comunidades Rurales Vulnerables en la Macro Región Valles del Estado Plurinacional de Bolivia” (RECEM Valles), fue diseñado por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en coordinación con el Estado Plurinacional de Bolivia y proyecta beneficiar a más de 58.000 pequeños agricultores, de los cuales 2.700 de ellos son indígenas y el 50% serán mujeres. El proyecto se ejecutará en un plazo de cinco años. Además de los fondos aprobados en calidad de donación, el proyecto contará con un apalancamiento de US$ 30 millones.  

El proyecto centrará sus esfuerzos en la gestión agroecológica, el uso de tecnologías en riego, carpas solares, mantas térmicas, mallas antigranizo, y la promoción del uso de información meteorológica y climática oportuna, impulsando el acceso a mercados e instrumentos financieros con garantías no convencionales. También se buscará conservar y restaurar las condiciones de los ecosistemas locales y mejorar la resiliencia de más de 23.400 hectáreas de producción agroecológica, 4.448 hectáreas de tierras agrícolas y 17.510 hectáreas de microcuencas estratégicas. 

Bolivia es considerado uno de los países más vulnerables del mundo al cambio climático, y la Macro Región Valles -donde será ejecutado el proyecto- es una de las zonas más afectadas por la sequía y otros eventos climáticos. Es la primera vez que el FVC beneficia a Bolivia por medio de un proyecto grande. 

Estimaciones del Ministerio de Medio Ambiente y Agua, en su Plan de Riego 2017-2020, indican que la agricultura consume hasta el 80% de todos los suministros de agua dulce disponibles.  

“Celebramos este hito para el país que nos permitirá avanzar en el cumplimiento de las metas del Plan de Desarrollo Económico y Social 2021 – 2025 y la Contribución Nacional Determinada de Bolivia en los sectores agua, bosques y agropecuaria 2021 – 2030, presentadas por el Estado Plurinacional a la Convención del Clima, en el marco del Acuerdo de París. La región beneficiada es amplia y diversa como sus pueblos. Es una prioridad para nosotros contribuir a su lucha contra el cambio climático”, dijo el Viceministro de Planificación y Coordinación, Carlos David Guachalla. 

El proyecto fijará una participación del 30-50% de las mujeres en todas las actividades y el acceso a los activos y la financiación de la iniciativa, lo que coadyuvará en la generación de ingresos para que las mujeres y los jóvenes disminuyan la necesidad de emigrar del campo a la ciudad. 

El proyecto también involucra en el desarrollo y ejecución del proyecto, a las organizaciones de los pueblos indígenas y naciones originarias campesinas, quienes fueron consultados y aportaron activamente en la elaboración de la propuesta a través de talleres y consultas en los municipios.  

Según el Representante de la FAO en Bolivia, Rodrigo Roubach, “las mujeres son las responsables del 48% de los cultivos en la Macro Región Valles y esto se incrementa debido a la migración estacional de hombres a zonas urbanas por trabajo. El proyecto beneficiará de forma sustantiva a las mujeres, muchas de las cuales son el núcleo central de sus familias”. 

Especialista por resultados de inédito estudio mundial: “La contaminación atmosférica es una pandemia”

El primer estudio mundial sobre contaminación atmosférica reveló que solo el 0,18% de la superficie terrestre y un 0,001% de la población del mundo vive en niveles de contaminación seguros para los estándares de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Para el académico del Departamento de Ingeniería Química de la Universidad de Santiago de Chile, Luis Alonso Díaz Robles, los datos relevados por el equipo de científicos que lidera Yuming Guo, de la Universidad Monash de Melbourne, son “preocupantes”.

“Actualmente, en el mundo mueren casi nueve millones de habitantes producto del material particulado, lo que es casi comparable con el COVID-19. Hoy, la contaminación atmosférica es una pandemia”, considera el doctor en ingeniería ambiental de la Universidad de Tennessee.

El estudio, que hace un mapa de la evolución de las PM 2.5 en las últimas dos décadas, arroja que Asia, Australia, Nueva Zelanda, América Latina y el Caribe han aumentado sus indicadores, y una de las zonas que presenta mayores concentraciones es el sur de América, con 15.6 μg/m³.

A juicio del experto en gestión de la calidad del aire y control de la contaminación atmosférica, la situación en la región puede deberse a que en “los países donde hay pobreza energética se tiende a usar combustibles más sucios que Energías Renovables No Convencionales”.

Respecto a la situación en Chile, el académico del magíster en medio ambiente de la Usach valora el aumento en el uso de este tipo de energías, pero considera que “aún nos falta mucho por caminar, sobre todo a nivel residencial”.

“De Santiago hacia el sur, se sigue usando en forma masiva la combustión residencial a leña”, afirma. Además, señala que el factor del aumento poblacional también influye. “En Santiago, no hay un política clara respecto a restringir los vehículos de combustión, como los diésel”, agrega.

Con todo, Díaz Robles considera que sí es posible revertir la situación, a través de la mitigación. “Se puede con inversión; tecnología; voluntad política; normas de emisión y calidad importantes, fuertes y estrictas; y una educación ambiental relevante, para que la gente tome conciencia y avancemos”, concluyó.

A 3 años de que la OMS declarara la emergencia sanitaria: “Hubo un resurgir del material plástico”

Este sábado 11 de marzo se cumplen tres años desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara como una pandemia el coronavirus, un problema que afectó en más de un solo aspecto. Uno de ellos fue a nivel medioambiental. Para la especialista del Centro de Innovación en Envases y Embalajes (LABEN-CHILE) de la Universidad de Santiago y Líder de proyectos de Co-Inventa, Alejandra Torres, uno de ellos fue a nivel medioambiental.

La académica abordó el tema hace una semana y, tras su exposición, la ingeniera química, doctora en ciencia y tecnología de los alimentos y experta en envases, con foco en la protección del Medio Ambiente, vuelve a referirse a esta situación. 

En Chile y el resto del mundo, se está trabajando fuertemente en muchas estrategias con el objetivo de disminuir el impacto medioambiental. En base a esto, se trabaja con la Ley REP (Responsabilidad Extendida del Productor), el Pacto Chileno de los Plásticos y la Regulación de plásticos y productos de un solo uso, pero lo que pasó es que, al llegar la pandemia, las personas, en general, dejaron de preocuparse por el medioambiente para preocuparse más por la salud personal, y cuando hablamos del resurgir del plástico, nos referimos a que muchos productos que empezaron a aparecer en la pandemia venían envasados o se utilizaba material plástico para ello; es decir, material médico, como guantes y mascarillas. Se empezó a provocar un uso indiscriminado, pero en ese momento no era la necesidad preocuparnos de qué pasaba con ellos después, sino cómo afectaban la salud. Por lo tanto, la idea era que, con el uso de este material, no nos fuéramos a contaminar.

“Por un lado, estaba el tema médico. Sin embargo, por el otro, también estaba el delivery, que aumentó muy fuertemente, porque nos permitía no salir de casa. Como sus productos venían en material envasado, bolsa o material plástico, se llegaba y se botaba. Entonces, uno con ello se sentía tranquilo, pensando que así estábamos evitando contagiarnos, pero al ir avanzando la pandemia y habiendo más conocimiento, vuelven a reflotar todas las estrategias que se estaban llevando a cabo, con el resguardo de que se debían mantener ciertas condiciones, porque la pandemia no ha terminado. Con todo, efectivamente, hubo un resurgir del material plástico; un uso y abuso indiscriminado durante la pandemia.

En Chile, hay varias regulaciones en base al material plástico, como la Ley REP, donde uno de los objetivos es trabajar con diferentes productos prioritarios, como envases y embalajes, que es con lo que estamos trabajando nosotros en LABEN. Lo que se pretende es que el productor que pone ese producto en el comercio, después se haga cargo de su residuo como una forma de mejorar la gestión y valorización de esos materiales. También, está la Ley de Bolsas, que se implementó hace varios años y que está en vigencia, pero hay una discusión respecto a cuán efectiva está siendo, dado que en el Retail o en las ferias aún se entregan bolsas plásticas, las mismas que se estaban ocupando antes. En los supermercados, se cobra por otro tipo de bolsa que es de un plástico que no se va a degradar fácilmente, por lo que termina parando en el vertedero, y eso es lo que no queremos. Se está trabajando, pero en Chile aún falta mucho trabajo, difusión y educación, que es lo que al final va a hacer posible que se pueda mantener en el tiempo.

LABEN lleva más de 20 años trabajando en cómo ayudar a la sociedad con respecto al manejo de este material plástico. Hemos tenido varios proyectos de investigación básica o aplicada, trabajo con empresas y, también, participamos con este objetivo en el Pacto Chileno de los Plásticos, con ASIPLA (Asociación Gremial de Industriales del Plástico) y, también, tenemos varios proyectos enfocados al reciclado.

“Además, estamos trabajando en uno que dirijo yo, junto con otros académicos e investigadores. Se trata del desarrollo de una plataforma y una guía del reciclaje. El objetivo y la gracia que va a tener es que va a ser adecuada a la realidad chilena. La idea es que entregue una alternativa a usuarios de envases y embalajes, pero que, también, pueda ser utilizada en el consumidor general que quiera saber qué condiciones debiera tener un material específico para envasar cierto tipo de producto alimenticio. Nuestra idea es que esta guía y esta plataforma impacten, abarcando a toda la sociedad, y sea una ayuda en ese sentido.

 

Avanza la construcción del nuevo sendero a Base Torres

Los trabajos para dotar a la 8va maravilla del mundo de un sendero que esté a la altura de su belleza e interés turístico, no descansan. Como se recordará, el sendero que conduce al Mirador Base Torres empezó a ser intervenido el año pasado por un grupo de expertos y voluntarios con el objetivo de mitigar la erosión causada por el tránsito de miles de turistas. 

Gracias a una alianza entre la ONG AMA Torres del Paine y Conservation VIP, con la colaboración de Torres del Paine Legacy Fund, y con todo el apoyo logístico de Reserva Las Torres, un grupo de 10 expertos en construcción de senderos sostenibles pudo llegar hasta los confines del mundo, en la Patagonia chilena, para dar su concepto, conocimiento y experiencia en las labores de reconstrucción del sendero a Base Torres.

Un año después, con el ánimo de lograr un nuevo sendero a Base Torres en el menor tiempo posible, los trabajos ya están nuevamente en marcha con el aporte de expertos internacionales como Garry Oye, de Conservation VIP, quien estuvo liderando personalmente los trabajos, tal como lo ha hecho en varios lugares del mundo. 

Asimismo, el experto en senderos Jacob Brett Sutra, quien diseñó el nuevo sendero a Base Torres en sus inicios, regresó a la Patagonia para colaborar con Torres del Paine Legacy Fund y los guardaparques de AMA Torres del Paine en labores de desmalezamiento, drenajes, entre otros aspectos determinantes para una planificación sostenible del territorio. 

El experto internacional de senderos sostenible Fischer Toussaint Bissell Gangemi, tiene la misión de continuar los trabajos de voluntariado y colaboración con Reserva Las Torres durante los meses que siguen de esta temporada. 

“Los esfuerzos siguen siendo importantes, ya que la tarea es importante.  Tener un sendero sostenible hacia las famosas torres de granito es simplemente necesario, y todos podemos ser parte de la causa.  El llamado es a todo tipo de empresas turísticas para que puedan colaborar en este trabajo, de contar con un sendero a Base Torres sostenible a la altura de este magnífico destino”, afirmó Mauricio Kusanovic, miembro Directorio de Reserva Las Torres. 

Recientemente, empresas como Venture Patagonia, y Quazar Expeditions han realizado aportes para ayudar y colaborar en la ardua tarea de avanzar con el nuevo sendero, entendiendo que será un gran beneficio para toda una comunidad que vive del Turismo en Torres del Paine, así como para los futuros turistas que visitarán Base Torres en un sendero seguro, amigable con el medio ambiente y que, sin duda, harán de este trayecto una mejor experiencia hacia la 8va maravilla del mundo. 

Comienza la construcción en Chile de ocho proyectos que suman 59 MW

El desarrollador latinoamericano de energía renovable Verano Energy dio inicio a  la construcción de ocho proyectos solares en Chile con una capacidad de 76 MWdc (59 MWac). Dichos proyectos se llevan a cabo a través de contratos EPC y O&M con Fontus Renewables, subsidiaria de EnfraGen.

Fontus Renewables, posee y opera proyectos de energía renovable en Chile y América Latina. Sus activos de energía solar fotovoltaica amplían su cartera de energía renovable existente, apoyando la transición energética de Chile como líder regional en la adopción de energía renovable.

Fundada en 2012, Verano Energy tiene una amplia experiencia en diversos aspectos del desarrollo de proyectos renovables en América Latina, incluidos el diseño, el financiamiento, la construcción y la gestión de activos. En los últimos años, la empresa también ha comprado proyectos solares para aumentar su cartera.

El contrato EPC es el más grande que Verano Energy realiza hasta hoy con terceros. Fontus confía en los servicios EPC de Verano Energy para construir estos proyectos solares a tiempo, dentro del presupuesto y con los más altos estándares.

«Hemos acumulado una experiencia interna sustancial en el desarrollo y ejecución de nuestros propios proyectos y hemos decidido aprovechar nuestro equipo interno de clase mundial para entregar contratos EPC de terceros. Estamos muy entusiasmados de expandir nuestros servicios para construir estos proyectos para Fontus”, señaló Dylan Rudney, director ejecutivo de Verano Energy.

Los ocho de estos programas participarán Proyectos PMG/PMGD de Chile. Proporciona acceso automático a la red y un plan de precio fijo.

La primavera pasada, Verano Energy adquirió 116 MWp de proyectos PMGD en Chile ubicados en 5 regiones de Chile y con un tamaño de entre 2,5 y 11 MWp. La cartera de proyectos de la compañía estadounidense en el país supera los 1,5 GWp.

H2-Uppp firma su primer acuerdo para apoyar la producción de amoniaco verde

Hace unas semanas la agencia de cooperación alemana GIZ y el consorcio europeo-chileno formado por las empresas Soventix Chile SpA, SI Solar Investments GmbH y Pabettin GmbH firmaron un contrato para ejecutar el proyecto de Cooperación Público-Privada (PPP) “SolarNH3-Pool Chile: Optimized green ammonia production pool in Antofogasta for export”, en el marco del Programa Internacional H2Uppp implementado en Chile por el Programa Energías Renovables de GIZ.

Actualmente el amoníaco verde es el derivado del hidrógeno que ofrece las mejores oportunidades en el mercado chileno y de exportación, debido a las ventajas energéticas y logísticas.  Por otra parte, la región de Antofagasta busca posicionarse como uno de los centros de desarrollo más importantes para la producción y exportación de hidrógeno verde y sus derivados, aprovechando su enorme potencial de generación de energías renovables.

En este contexto, el proyecto contempla la elaboración de una serie de estudios para el desarrollo de un parque (pool) de plantas de hidrógeno sostenible en la región de Antofagasta, basado en el aprovechamiento de sinergias y el uso compartido de la infraestructura regional optimizada para la producción y el suministro de hidrógeno a una planta de producción de amoníaco verde de gran escala, incluyendo un análisis técnico-económico y ambiental para el diseño de los diferentes elementos de la cadena de valor del proyecto. Con ello, el proyecto será una contribución para el desarrollo del Hub de Hidrógeno Verde en Antofagasta y para el logro de los objetivos nacionales de descarbonización y protección del clima.

En sus distintas fases, el proyecto contribuirá de forma diversa al desarrollo de la industria del hidrógeno verde y del Power-to-X (PtX) en Chile. Durante las fases de estudio y planificación, el proyecto contribuirá a la optimización de la infraestructura regional para la logística de transporte y almacenamiento, el suministro de agua y de energía, generando así condiciones para optimizar la sostenibilidad medioambiental de diversos proyectos de hidrógeno que se desarrollen en la región.

El Ministerio Federal de Economía y Acción por el Clima (BMWK) de Alemania ha encargado a la GIZ a través del Programa Internacional H2Uppp que apoye el desarrollo temprano del mercado de tecnologías y aplicaciones de hidrógeno verde en países en desarrollo y economías emergentes, mediante asociaciones con empresas privadas.

H2Uppp apoya la identificación y el desarrollo de proyectos, así como la búsqueda de socios entre empresas alemanas y europeas, estando abierta la convocatoria para postulación de proyectos público-privados hasta el 31 de marzo de 2023 en 4echile.cl.